Parece difícil creer que el cloro puede llegar a nuestra boca, y más por sus efectos nocivos en la salud. Sin embargo, el contacto del cloro con nuestros dientes puede ser más común de lo que se estima.El agua potable tiene ciertos niveles de cloro para poder conservarse, sin embargo el cloro que más perjudica nuestra salud bucal es el cloro que se encuentra en las piscinas.
Cuando llega el verano queremos disfrutar de piscinas y permanecer muchas horas en ellas, y desconocemos las consecuencias que tiene el cloro en nuestros dientes. El cloro que se almacena en las piscinas puede desajustar el pH natural que se encuentra en nuestra boca, lo que puede traer como consecuencias afecciones y también pérdida del color del esmalte dental.
El cloro y los dientes es una combinación que debemos vigilar. En el caso de estar en una piscina, se debe ser consciente de los posibles agresiones sobre nuestra salud dental.
El cloro y los dientes de los nadadores
Los más perjudicados son aquellas personas que practican natación, dado que requieren entrenamientos de 5 a 6 horas; tiempo suficiente para que el cloro haga daños en la cavidad bucal. Algunos estudios han demostrado que hay nadadores que presentan mucha sensibilidad en los dientes; otros tienen manchas marrones o negras debido a las altas concentraciones de cloro que poseen las piscinas.
Recomendaciones para piscinas y nadadores
Una vez comprendido el problema que genera el cloro en los dientes es importante buscar una solución, sobre todo en el caso de aquellos nadadores que necesitan entrenar muchas horas. Podrían emplear como método entrenar en piscinas con PH inferior a 7. A pesar de que habrá probabilidades de afectar la cavidad bucal, no tendrá consecuencias tan graves como bañarse en piscinas que superen un 7 en pH.
¿Cómo saber el nivel de pH en las piscinas?
Existen tiras de pH que permiten saber la cantidad de pH que hay en la piscina, de esta forma se puede saber si es seguro bañarse o es perjudicial para la salud. Hay que tener en cuenta que el cloro no solo hace daño para la cavidad bucal sino también para la piel, ojos y cabello.
¿Cómo cuidar nuestros dientes del cloro?
No es necesario practicar natación para padecer de los riegos del cloro, es por ello que se debe evitar pasar más de 6 horas en una piscina. En el caso de que eso ocurriese, asegúrate de limpiar tus dientes con cerdas suaves que permitan la limpieza de tus dientes y encías, y usa enjuagues bucales para eliminar los gérmenes y contaminantes químicos.
Esperamos que os haya gustado este artículo sobre la relación entre los dientes y el cloro. Si vives en Sevilla y quieres que revisemos la salud de tus pies puedes coger una cita con nosotros. 😊
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